Matías Santana, quien se encuentra detenido en Esquel por cuestiones judiciales vinculadas al conflicto de Villa Mascardi, fue condenado, junto a Laura Gisel Millananco y Ariel Navarro, a una pena de un año de prisión en suspenso a raíz de otra causa, relacionada con una situación que se produjo en marzo de 2018, fuera del Juzgado Federal de Bariloche, cuando se había leído la sentencia de extradición en el caso de Facundo Jones Huala.

Cabe recordar que, en aquella oportunidad, un grupo de personas se enfrentó con integrantes de las fuerzas de seguridad que custodiaban el lugar.

En aquel marco, algunos manifestantes retiraron vallas de seguridad y atacaron el edificio.

La sentencia del juez Horacio Greca, dada a conocer el viernes 28 de junio, refiere “al delito de atentado a la autoridad, doblemente agravado por haber sido cometido a mano armada y por la reunión de tres o más personas”.

Lo de “mano armada” apunta al uso de elementos como palos y piedras. A Gustavo Franquet, integrante de la Asociación Gremial de Abogados, entidad que se encargó de la defensa de los condenados, le hace “ruido” la carátula de “atentado a la autoridad”. “Nosotros estamos seguros de que, en el juicio, se demostró que no se configuró ese delito. Seguramente, podrían haberlos acusados por otras cuestiones, como daños, pero se lo hizo por eso, que es algo muy específico y, a través de los testimonios y las pruebas, no se verificó”, sostuvo el letrado.

“Queremos ver cuáles son los fundamentos de semejante sentencia”, observó Franquet. En ese sentido, hay que indicar que el juez Greca anunció que el miércoles 3 de julio se comunicarán en detalle los elementos que motivaron su decisión.

Franquet, crítico ante la determinación del magistrado, afirmó: “La alternativa, evidentemente, era tener que absolverlos, porque fueron acusados por un delito que no cometieron, y, frente a tal posibilidad, el juez decidió condenarlos igual”. Así, el letrado adelantó que presentarán un recurso de casación.

Más allá de eso, aclaró que, si bien Laura Gisel Millananco y Ariel Navarro quedaron en libertad, Santana permanece en prisión debido a la cuestión judicial de Villa Mascardi.

En tal sentido, cabe recordar que quien es conocido como “el mapuche de los binoculares”, por su intervención en el caso de Santiago Maldonado, fue capturado en Bariloche en febrero de este año.

Santana es el padre de los hijos de la machi Betiana Colhuan y su detención, precisamente, se produjo tras haber acompañado a la autoridad espiritual de la lof Lafken Winkul Mapu hasta una feria a la que acudía para vender artesanías.

En cuanto a la reciente sentencia del juez Greca, más allá de la pena de un año de prisión en suspenso, se imponen reglas de conducta por el plazo de dos años: “La fijación de un domicilio y notificación de cualquier cambio de residencia; abstenerse de cometer delitos; someterse al cuidado de la Dirección de Control y Asistencia de Ejecución Penal; y realizar trabajos no remunerados en favor del Estado o de instituciones de bien público, fuera de sus horarios habituales de trabajo, todo por el plazo de dos años”.

Por otra parte, el magistrado decretó en rebeldía y ordenó la captura de otra persona, Alejandro Javier Morales. En ese punto, encomendó a la Unidad Especial de Procedimientos Judiciales “Bariloche” de Gendarmería Nacional que realice tareas investigativas en la zona de Cuesta del Ternero (kilómetro 17.5 de la Ruta 6, El Bolsón), en pos de efectivizar la detención.